El 2020 ha sido un año especial para toda la población, también para nuestro trabajo como empresa de limpieza y como empresa de inserción. A lo largo de este año, hemos tenido que adaptarnos a una realidad desconocida para nosotras y para todas las personas.
Como empresa de limpieza nos ha tocado enfrentar esta situación como servicio esencial, con todo lo que esto supone:
- Afrontar la incorporación de medidas especiales de protección (nuevos EPIs, mayor reposición de los que ya teníamos, utilización diaria de productos desinfectantes, etc).
- Formar, sobre la marcha, a las personas trabajadoras de la limpieza en las medidas excepcionales a tomar en cada momento.
- Adaptar los servicios a la nueva realidad de pandemia: algunos servicios se fueron dando de baja (de manera temporal) a principios del mes de marzo y otros han requerido un esfuerzo mayor de desinfección. A todos ellos, hemos ido dando respuesta según sus necesidades.
- Afrontar la limpieza y desinfección de lugares “contaminados” con toda la profesionalidad requerida (trajes especiales, gafas y mascarillas).
- Asumir la no presencia en el puesto de trabajo por baja covid-19 o cuarentena de 9 personas (ninguna de ellas contagiada en su puesto de trabajo).
Como empresa podemos decir que hemos soportado el incremento de gastos (EPIs, materiales de protección, productos) y de bajada de ingresos (servicios que temporalmente se dieron de baja) sin tener que acogernos a un ERTE. A las personas que tenían asignados servicios que se dieron de baja se le asignaron trabajos de refuerzo (desinfección extra en portales, viviendas comunitarias o residencias).
Como empresa de inserción también hemos tenido que adaptarnos e implementar cambios en la manera de trabajar, tanto en el seguimiento de los procesos como en la formación realizada.
- Realizamos toda la capacitación en torno a lo que sabíamos sobre el covid-19 y las medidas de protección.
- En una empresa donde el 35% de las trabajadoras activas en marzo 2020 eran mujeres solas de niñ@s en edad escolar (algunas de ellas personas inmigrantes con poca red social), se realizó un gran esfuerzo de organización ante el repentino cierre de los colegios. La empresa ofreció apoyo económico a todas las trabajadoras que lo solicitaron para organizar y costear el cuidado de sus hijos durante el tiempo que estaban trabajando.
- Se hizo un gran trabajo de acompañamiento en las incertidumbres y miedos de las personas trabajadoras.
- Se realizó un video motivador, en los momentos más duros de la pandemia, para poner en valor el trabajo realizado y dar ánimos a las trabajadoras.
- En los primeros meses de pandemia informamos a las trabajadoras sobre todos los cambios que se iban produciendo tanto a nivel sanitario como educativo (muchas tienen niñ@s en edad escolar: cierre de colegios, deberes online, video llamadas, protocolos, etc).